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El acoso laboral "mobbing"



Por: Deisamar De Soto


Trabajar en un lugar puede ser algo digno y gratificante o simplemente convertirse en una pesadilla. Existen seres humanos que poseen supervisores o dueños de negocios comprensivos, que desean que sus compañeros se desarrollen y continúen subiendo peldaño a peldaño. Pero el contrario, también hay supervisores o dueños de negocios que tratan a sus empleados o compañeros de trabajo con menosprecio, como si fueran una máquina de trabajo, entre otros.


Por más que se educan las personas aún en el siglo 21, el maltrato laboral sigue siendo una realidad muy lamentable. Ningún acoso laboral debe ser permitido o catalogado como algo normal. ¿Cómo puedes distinguir el acoso laboral? Desde el momento en que existe un cambio en la empresa, ocasionando que el empleado se desmotive. Todo lo antes mencionado produce baja productividad, daños sicológicos (ansiedad, depresión, estrés), agotamiento emocional, daño en su reputación como profesional, entre otros. Ya sea un individuo o varios individuos ejercen violencia sicológica de manera sistemática y repetitiva sobre uno o varios empleados durante un tiempo prolongado.

Estos acosadores pueden ser desde compañeros de trabajo, superiores, subordinados, suplidores, clientes, entre otros, afectando a trabajadores de cualquier empresa e industria. También existe el “gaslighting” en el cual se trata de confundir a la víctima para que crea que es culpable de todo lo que ocurre y la misma llega a cuestionar el sano juicio de quien lo sufre.


El acoso laboral puede ser según la jerarquía (horizontal o vertical en un organigrama empresarial). De igual manera, existe el acoso laboral según el objetivo y este lo dividimos en diversos aspectos: 1. estratégico y como consecuencia haya una renuncia;

2. dirección o gestión ocasionado por la dirección de la organización ocurriendo un despido; 3. El perverso, que se le llama al acosador de personalidad manipulativa y hostigadora; 4. Disciplinario, que es cuando se emplea para que la persona acosada entienda que debe “entrar en el molde” y si no lo hace es castigada; este último es utilizado frecuentemente en mujeres embarazadas, entre otros.


Un buen ambiente laboral tiene como propósito mejorar el sentimiento de realización de los colaboradores, de tal forma que se sientan satisfechos con su condición como empleados. De lo contrario, no durarán en buscar otras oportunidades afectándose así el trabajo realizado.


Un buen ambiente de trabajo se logra si fomentas la autonomía, la confianza, la comunicación, el respeto, celebrando los éxitos de cada empleado, entre otras muchas característica que un buen líder conoce.



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